La presidenta de Adif expone la preparación de la entidad de cara a la liberalización del transporte ferroviario de viajeros

En una jornada organizada en Madrid por IE Business School
• Pardo de Vera ha señalado la necesidad de maximizar el tráfico y asegurar la calidad y puntualidad del servicio, al tiempo que se contribuye a incrementar la sostenibilidad económica de los administradores ferroviarios
• Adif está desarrollando una serie de procesos que facilitarán la entrada de nuevas operadoras en el mercado, como el establecimiento de acuerdos marco por un periodo mínimo de 5 años
• Los análisis realizados concluyen que, en una primera etapa, la liberalización puede propiciar un incremento del tráfico de entre un 30 y un 50%

04/02/2019. La presidenta de Adif y Adif Alta Velocidad, Isabel Pardo de Vera, ha expuesto hoy las actuaciones puestas en marcha en ambas compañías de cara a la liberalización del transporte ferroviario de viajeros en 2020, en el marco de una jornada organizada en Madrid por IE Business School.

Durante su intervención, Pardo de Vera ha puesto de manifiesto la importancia de este proceso para la sociedad en general y para las entidades que preside en particular. En este sentido, ha señalado la necesidad de maximizar el tráfico y asegurar la calidad y puntualidad del servicio, uno de los principales atributos de la red española de alta velocidad, al tiempo que se contribuye a incrementar la sostenibilidad económica de los administradores ferroviarios.

Asimismo, ha destacado que los análisis realizados por Adif indican que la liberalización podría producir, en una primera etapa, un incremento del tráfico que rondaría entre el 30 y el 50%. De este modo, España avanzaría hacia un incremento en los índices de uso de de la red de alta velocidad, que es la que presenta un mayor atractivo comercial y donde el ferrocarril es más competitivo que otros modos de transporte. Actualmente, nuestra red se utiliza una quinta parte que en la francesa, y aproximadamente una tercera parte que en la alemana o la italiana.

En el caso de Italia, la liberalización del transporte ferroviario de viajeros, que se produjo en 2012, se ha revelado el más emblemático de nuestro entorno y un referente para Adif, con efectos muy beneficiosos para el conjunto del sector. Así, el mercado de alta velocidad en ese país ha crecido un 80% desde su liberalización hasta 2016, pasando de 38 millones de viajeros a 68.

Por todo ello, Adif está desarrollando una serie de procesos que facilitarán la entrada de nuevas operadoras en el mercado. Se está trabajando en un estudio sobre la reorganización del tráfico actual, para que sea posible introducir los servicios de las nuevas empresas ferroviarias, garantizando globalmente la oferta que actualmente se viene prestando por Renfe. También se va a dar visibilidad a la capacidad disponible en la red, al tiempo que se facilita seguridad jurídica a las empresas, mediante la suscripción de acuerdos marco que garanticen la reserva de capacidad por un periodo de 5 años, que puede ser de duración superior en caso de existencia de compromiso de fuertes inversiones.

De igual modo, se consolidará un sistema de cánones por el uso de la red que aporte estabilidad y certidumbre a las empresas. Adif ha incluido en la Declaración sobre la Red (documento que recoge las principales características de la infraestructura titularidad de Adif) para 2019 una descripción del modelo empleado para el cálculo de los costes directamente imputables, lo que supone un paso más en el cumplimiento del marco europeo.

Finalmente, se está valorando la posibilidad de efectuar la declaración de “línea especializada” para las principales líneas de alta velocidad, lo que daría prioridad a los tráficos que mejor se adapten a un uso más intenso de las mismas, en el conjunto de la longitud de cada una de ellas.

Plan de adaptación al Cuarto Paquete Ferroviario
Adicionalmente, Adif está trabajando en un plan de adaptación al Cuarto Paquete Ferroviario, la base normativa europea conforme a la que se está desarrollando el proceso de liberalización.

Este plan incluye todos los aspectos relacionados con el servicio que se presta a los clientes del ferrocarril. De esta manera, Adif está preparando las estaciones a la incorporación de nuevos operadores bajo cuatro criterios de gestión: trato no discriminatorio, transparencia, flexibilidad y sostenibilidad.

El objetivo es poner a disposición de los nuevos operadores la información relativa a los servicios ofertados, procedimientos de solicitud y adjudicación, así como precios. Todos los servicios se ofrecerán en un catálogo que será publicado en la Declaración sobre la Red.

Asimismo, Adif ha iniciado, de manera proactiva, un proceso de búsqueda y localización de terrenos de su propiedad susceptibles de ser puestos a disposición de los nuevos operadores, para la construcción de sus instalaciones. Próximamente se publicará el correspondiente catálogo en la página web de Adif.

Por último, se están habilitando los procedimientos necesarios para mejorar la imputación de los consumos energéticos efectuados por cada tren, con el objetivo de poder facturar a cada operador lo realmente consumido por cada servicio. Siguiendo la tendencia que se constata en los países europeos, se transita hacia un modelo basado en la medida embarcada como unidad de facturación del servicio.

Cabe destacar en este sentido dos logros importantes: la experiencia piloto llevada a cabo en el corredor de Levante (Madrid-Valencia-Alicante), en la que Adif ha conseguido evolucionar el sistema desde una facturación de la energía eléctrica realizada con criterios de caja a una facturación por servicio mediante medida embarcada; y la futura implantación del proyecto Smart Grid, recientemente galardonado, en la red de alta velocidad.

Retos
En el capítulo de retos, Adif está desarrollando actualmente un plan para paliar la saturación de las grandes estaciones ferroviarias de alta velocidad, como Madrid Puerta de Atocha o Barcelona Sants, cuya capacidad de crecimiento se ve limitada por su ubicación central en el entramado urbano.

Para conseguir un uso más riguroso de estas terminales se ha introducido en la Declaración sobre la Red el concepto de “estación coordinada”. Esta definición se aplica a aquellas estaciones en las que, por su alta saturación y su futuro uso compartido por varias empresas ferroviarias, será necesario declarar el tiempo de estacionamiento requerido en origen y destino del tren, así como su longitud.

Asimismo, se valorará incluso calificarlas como “infraestructuras congestionadas”, lo cual posibilitaría la aplicación de reglas especiales de prioridad de acceso y control de su uso, y obligaría a establecer un plan de aumento de la capacidad para cada una de ellas.

En línea con lo anterior, se están impulsando actualmente actuaciones sobre la infraestructura que permitan mitigar la saturación de las principales terminales de alta velocidad, esto es, en Barcelona Sants y las estaciones madrileñas de Puerta de Atocha y Chamartín.