Feve pondrá en marcha trenes nocturnos y más salidas para acudir a fiestas de San Severino y al tradicional concurso de Putxeras

La empresa ferroviaria pondrá en marcha siete trenes nocturnos en la cercanía de Enkarterri durante la madrugada del sábado al domingo.
El primer premio consistirá en un viaje para dos personas en el tren turístico de lujo El expreso de La Robla

20/10/2011
El próximo fin de semana, Balmaseda festejará el día de su patrono, San Severino y Feve pondrá en marcha trenes nocturnos durante la noche del sábado al domingo desde Bilbao a Balmaseda – La Calzada a las 0,20 – 2,00 – 4,00 y 6,00 horas.

En el sentido opuesto, los especiales circularán a las 1,08 – 2,57 y 4,57 horas. Los trenes nocturnos pararán en todas las estaciones y apeaderos del recorrido, a excepción de los apeaderos de Bolunburu y Colegio.

Además, para facilitar el acceso la localidad de Enkarterri la mañana del domingo, partirá desde la estación de La Concordia un tren con salida a las 9,20 horas, de manera que se pueda disfrutar durante toda la mañana del ambiente que anualmente se crea en torno a las más de cien putxeras que participan en el concurso gastronómico.

Viaje en El expreso de La Robla
El certamen internacional congregará de nuevo a miles de personas en Balmaseda y, un año más, Feve concederá el galardón más preciado del tradicional Concurso Internacional de Putxeras; un viaje para dos personas en el tren turístico El expreso de La Robla.

El plato principal de la fiesta será la celebración del concurso gastronómico de putxeras ferroviarias que la tradición y el renombre han convertido en internacional. Allí se reunirán las peñas y desde primeras horas de la mañana comenzarán a preparar los ingredientes que a fuego lento se guisarán en el recipiente típicamente ferroviario. Los participantes seguirán los pasos de la receta tradicional a base de alubia roja, chorizo, morcilla, tocino, productos porcinos, costilla y falda de vacuno, siendo obligatorios para concursar los tres primeros ingredientes.

El ferrocarril de La Robla fue la cuna de una de las tradiciones gastronómicas más peculiares de la cocina del norte. Al calor del carbón y al ritmo del traqueteo de las locomotoras de vapor de antaño, los ferroviarios preparaban su almuerzo en una olla que se colocaba en la salida de vapor de la caldera de la máquina. Las alubias se cocinaban lentamente junto con la carne y el chorizo y horas después la comida estaba preparada. Los ferroviarios trasladaron a la costumbre popular el invento y en Balmaseda el día de las putxeras es la jornada grande de sus festejos patronales.

El recipiente donde se cuece la putxera ferroviaria es en sí mismo una obra de arte. Un armazón de chapa reforzado con remaches, elaborado artesanalmente. Tiene tres patas y en la base y los laterales superiores orificios que permiten la entrada de aire que si es preciso se insufla en lo que se considera el “alma mater” del que se precie buen cocinero, el fuelle. En el interior de este armazón se coloca carbón vegetal. Y encaja dentro una olla de porcelana. En esta olla se colocan los ingredientes. Sustituye así el armazón de encaje a la caldera de la locomotora. Así cocinaban en el tren los trabajadores que no viajaban en la máquina.