Adif localiza un yacimiento arqueológico de la época romana durante las obras de construcción de la Estación de La Sagrera

En el entorno del Pont del Treball
• Los restos ocupan una superficie aproximada de 1.100 m2 y corresponden a una villa termal
• Tras su localización, Adif colabora en los trabajos de excavación, inventariado e interpretación siguiendo los criterios de técnicos del Museo de Historia de Barcelona y el Departament de Cultura de la Generalitat

Barcelona, 2 de septiembre de 2010 (Adif).
Adif ha localizado un yacimiento arqueológico de la época romana  durante las obras de ejecución de los accesos a la futura Estación de La Sagrera, en Barcelona. El conjunto arquitectónico hallado corresponde a una villa termal y ocupa una superficie aproximada de 1.100 m2 en el entorno del Pont del Treball.

De acuerdo con los protocolos establecidos en sus proyectos, Adif comunicó la localización del yacimiento a los servicios arqueológicos del Museo de Historia de Barcelona y del Departament de Cultura de la Generalitat, que se encargan de las labores de inspección, control, coordinación, apoyo científico y de los permisos correspondientes.

En estos momentos, se está procediendo a las tareas de excavación, inventario e interpretación de los restos, con un coste aproximado de 750.000 euros y en las que participan 7 arqueólogos y 58 auxiliares. En estas labores colaboran Adif y las empresas adjudicatarias de las obras realizando operaciones de topografía y aportando personal de apoyo para el trabajo de campo y la maquinaria necesaria.

Descripción del yacimiento
Los restos se localizaron durante los trabajos previos de movimiento de tierras para la preparación de la plataforma del vial segregado para vehículos en el lado mar, en el marco de las obras de ejecución de los  accesos a la Estación de La Sagrera. Su localización comprende el ámbito entre el actual y el futuro Pont del Treball y el vial segregado para vehículos que se construirá en el lado mar.

El yacimiento ocupa una superficie aproximada de 1.100 m2 y según las primeras investigaciones, corresponde a una villa termal de la época romana.

Dentro del conjunto arquitectónico se pueden distinguir tres áreas, la  primera de ellas situada más al norte, en la que se han localizado un conjunto de cimentaciones y muros que definen una serie de habitaciones dispuestas en batería.

Algunas de las estancias presentan restos de pavimentos realizados en diferentes formas de mosaicos, como opus sectile (piezas de mármol de diferentes colores) y opus signinum (formados por una mezcla de cal, arena y fragmentos de barro aplicados en tierras y paredes e impermeables), lo que junto a la distribución de los distintos ámbitos hace suponer, según las primeras teorías, que se trataría de la pars urbana de la vila. Al norte de estas estancias, se han documentado muros correspondientes a ampliaciones y reformas de la villa para dotarla de un espacio organizado en torno a un lacus o depósito central.

En el segundo espacio, situado en el extremo sur, se ha localizado otro conjunto de habitaciones distribuidas mediante dos corredores perpendiculares. Esta área, que igualmente correspondería a la pars urbana de la villa, también dispone de una zona termal, habiéndose documentado una piscina posiblemente destinada a baños fríos y el fondo de una terma caliente. Asimismo, también se han localizado pavimentos de opus tessellatum (formados por piezas cúbicas policromadas que combinaban formas geométricas y figuradas) y pinturas en los muros.
Finalmente, entre estos dos conjuntos de habitaciones se define una gran espacio en el que se han documentado restos de pavimentación de signinum y que se trataría de un atrio central entorno al cual se distribuirían el resto de edificaciones de la pars urbana.

En relación a la cronología, se está trabajando para fechar su construcción, si bien se han recuperado durante la excavación materiales cerámicos de la época alto imperial. Por otro lado, los datos obtenidos hasta el momento apuntan a que siguió en uso al menos hasta los siglos IV-V d.C.

Las primeras inspecciones también han permitido constatar que durante todo el período de ocupación de la villa romana, ésta fue objeto de diversas alteraciones constructivas, que podrían corresponder a reformas, ampliaciones o incluso cambios en la funcionalidad de los espacios.

Seguimiento arqueológico en Adif
De acuerdo con su compromiso de preservación del patrimonio durante la construcción de nuevas infraestructuras, Adif define apartados específicos destinados a trabajos de seguimiento arqueológico. De este modo, en los proyectos de construcción de la estructura y accesos de la nueva Estación de La Sagrera, se destinan equipos técnicos y cerca de 170.000 euros a estas tareas.

Asimismo, se establecen protocolos de actuación en aquellos casos en los que se encuentran restos arqueológicos. En el caso del yacimiento localizado en el entorno de La Sagrera, Adif comunicó su hallazgo a técnicos de los servicios de arqueología del Departament de Cultura de la Generalitat y del Museo de Historia de Barcelona, que se encargan de las labores de inspección, control, coordinación, apoyo científico y de los permisos correspondientes.

Los materiales exhumados durante la intervención se depositan en el archivo arqueológico del Museo de Historia de Barcelona.

Gracias a los recursos que Adif destina al seguimiento arqueológico en sus proyectos, en el entorno de La Sagrera se han localizado y documentado otros restos, entre las que figuran, silos y asentamientos de la época neolítica, silos de la época ibérica o rasas de viña de la época romana.