Inicio de las obras de la estación de Barcelona-La Sagrera Alta Velocidad

“Ni Espanya, ni Catalunya, ni Barcelona no es poden permetre retardar més la connexió d’alta velocitat amb Europa. Fa massa anys que esperem. Fa massa anys que afecta negativament la nostra competitivitat com a país”. Ha estat l’avís que ha llançat aquesta tarda el president de la Generalitat, José Montilla, en l’acte d’inici d’obres de la futura estació intermodal de la Sagrera, a  Barcelona, que ha de ser “un pas més en un dels projectes més emblemàtics que s’estan duent a terme en aquests moments a Catalunya i a Espanya”.

“Potser hi haurà alguns projectes de l’alta velocitat que s’hauran de reprogramar a causa de les dificultats pressupostàries. Aquest no”, ha dit el cap del Govern, que tanmateix ha expressat el seu convenciment que el ministre de Foment, José Blanco, present en l’acte, “entén que no podem permetre un nou ajornament d’una infraestructura clau”.

Compromís per superar la crisi
Projectes com el de la Sagrera, ha exposat el president, demostren el compromís de les administracions central, autonòmica i local de seguir lluitant per superar la crisi. “Ens calen –ha afegit- projectes, actituds i gestos” com aquest per “trencar el cercle viciós de crisi, desànim i atur”.

En aquest context, el cap de l’Executiu ha lamentat que, en canvi, hi ha “qui sembla esforçar-se només a trobar arguments perquè tot sembli més negatiu. I no els importa el desànim col·lectiu o la irritació social si això millora les seves perspectives electorals. Són especuladors de l’ànim i la moral, tant o més perillosos que els especuladors financers”.

En contraposició amb aquestes actituds, el projecte de la Sagrera “és una acció ben real d’obra pública amb finançament compromès”, fruit de la “cooperació entre administracions”, ha dit.

I ha conclòs: “Aquesta gran obra respondrà, també, a la plena consciència de la necessitat de ser austers, rigorosos, racionals”, i, al mateix temps, “a l’ambició ben legítima d’una ciutat que afirma la seva voluntat de tenir un lloc indiscutit entre les ciutats més potents d’Europa”.

Blanco y Montilla asisten al acto de inicio de las obras de la nueva estación de La Sagrera (Barcelona)

Cuenta con una inversión de 589 millones de euros

* La Sagrera se construirá con criterios de eficiencia energética y sostenibilidad, y será completamente accesible a personas con discapacidad.
* Con una afluencia estimada de 100 millones de usuarios anuales, la estación se convertirá en un polo estratégico de la red de transporte público en el área metropolitana de Barcelona.
* Se trata del proyecto de soterramiento ferroviario más importante de Europa en la actualidad, con 38 hectáreas de superficie.

lunes, 21 de junio de 2010

El ministro de Fomento, José Blanco, el presidente de la Generalitat de Cataluña, José Montilla, y el alcalde de Barcelona, Jordi Hereu, han presidido hoy en Barcelona al acto de inicio de las obras de construcción de la Estación de La Sagrera.

Al acto también han asistido el delegado del Gobierno en Cataluña, Joan Rangel, el conseller de Política Territorial y Obras Públicas, Joaquim Nadal, y el presidente de Adif, Antonio González Marín.

Se trata del proyecto ferroviario singular de mayor envergadura adjudicado en España, gracias a una inversión superior a 589,2 millones, y el proyecto de soterramiento ferroviario más grande de Europa en la actualidad, con 38 hectáreas de superficie.

La nueva estación central de La Sagrera se convertirá en un nudo estratégico de la red de transporte público en el área metropolitana de Barcelona al conectar la ciudad de una forma más rápida y segura con la red ferroviaria española y europea.

Las instalaciones se han proyectado con capacidad para acoger un tránsito superior a los 100 millones de viajeros anuales, convirtiéndose en un intercambiador de primer orden, enlazando la alta velocidad ferroviaria con las redes de cercanías, regionales, metro, autobús y taxis, así como con el transporte privado al estar conectada directamente con las principales vías de comunicación.

El conjunto de infraestructuras, la estación central y la urbanización de los sectores de Sant Andreu y La Sagrera representan el proyecto de mayor inversión económica a desarrollar en la ciudad de Barcelona en los próximos años. La inversión global asciende a unos 2.250 millones de euros, sin contar con las posteriores actuaciones de urbanización y edificaciones de viviendas, equipamientos, comercios, oficinas y hoteles.

En esta actuación se cubrirán 38 hectáreas de superficie ferroviaria, lo que permitirá integrar los barrios separados por las vías, a lo largo de casi 4 kilómetros, entre la calle Espronceda y el Nus de la Trinitat, lo que supone una profunda transformación urbanística y de vertebración del territorio en 164 hectáreas, generando nuevas oportunidades de desarrollo económico y de cohesión social.
Principales beneficios

La construcción de La Sagrera ofrece como principales ventajas
:
* Una nueva estación que integrará en un mismo edificio, en dos niveles diferentes, los tráficos de cercanías y regionales por vía convencional, y los de alta velocidad y larga distancia en ancho internacional.
* Creación de un espacio intermodal que conectará la alta velocidad con cercanías, regionales, metro y autobuses urbanos e interurbanos.
* Implantación de criterios de accesibilidad integral para personas con discapacidad, criterios de eficiencia energética y sostenibilidad para conseguir un uso racional de la energía y un consumo responsable de los recursos naturales.
* Configuración de un nuevo espacio urbano sobre los terrenos que libera toda la actuación ferroviaria, mediante la construcción de una nueva estación de varios niveles.
* Mejora de las condiciones de acceso al modo de transporte ferroviario en la ciudad de Barcelona.
* Nuevos accesos ferroviarios y viarios en los ámbitos urbanos de La Sagrera, Sant Andreu y Sant Martí.
* Aumento de la seguridad con la adecuación del esquema de vías para tecnologías punta en sistemas de conducción automática de trenes.
* Incremento de la capacidad y la regularidad, como resultado de disponer de doble vía en todo el trayecto.
* Aumento del confort, al establecerse unas condiciones óptimas de rodadura y trazado.
* Reducción de tiempos de viaje y un aumento de la frecuencia de servicios, al disponer de vías específicas para la logística y el estacionamiento de trenes.

Características de la nueva estación
La nueva estación será semisoterrada y tendrá una superficie de casi 259.000 m2, distribuidos en varios niveles y concentrando el máximo de servicios en vertical, contribuyendo a mejorar la eficacia en el movimiento de las personas. Su disposición dará continuidad al espacio público generado sobre las vías actuales y tendrá dos accesos unidos por un gran espacio de conexiones.

Los niveles superiores, a los que se accederá desde La Sagrera, corresponden a los servicios de alta velocidad y a la estación de autobuses interurbanos. El vestíbulo dispondrá de un gran espacio central de acogida y distribución de usuarios, taquillas y zona comercial. Para los servicios de alta velocidad se construirán 10 vías, dos generales y ocho de servicio, con cuatro andenes de 400 m de longitud y un quinto de 200 m, todos ellos con un ancho de 12 m.

Los niveles inferiores se destinarán a los servicios de cercanías, metro y aparcamientos. Las vías de ancho convencional serán objeto de una profunda remodelación para adecuar su paso por la futura estación y se abrirán en un haz de ocho vías al paso por la estación con 4 andenes de 240 m de longitud. Después del ámbito de la estación, se ha proyectado un área logística de servicios de ancho internacional para estacionamiento y mantenimiento.

A ambos lados del vestíbulo de cercanías se integrarán 4 grandes aparcamientos, con una capacidad aproximada de 2.500 vehículos, para servicio tanto de la estación ferroviaria como de la autobuses y en un futuro de la zona de servicios que se construirá en el entorno. Las dos zonas de la estación, lados La Sagrera y Sant Martí, quedarán unidas por un gran patio de conexiones que conforma el nudo intermodal entre los diferentes servicios de transporte público.

La estructura se ha proyectado de forma que se garantiza la accesibilidad universal y el tránsito por todos los espacios del edificio. Asimismo, se han tenido en cuenta parámetros de ahorro de energía y aislamiento térmico, de tal forma que se consigue un uso racional y eficiente de la energía necesaria para la sostenibilidad y la adecuada utilización del edificio.

Por su parte, las obras de construcción de los accesos, tanto ferroviarios como viarios así como de parte de la estructura de la estación de autobuses, comprenden el ámbito situado entre el Pont de Bac de Roda hasta la futura estación, con una longitud de 220 m, y desde este punto hasta el denominado triángulo ferroviario.

La accesibilidad de vehículos se resolverá mediante la red viaria en superficie prevista para el sector, completada con un sistema de viarios segregados que permiten el acceso a los aparcamientos, la estación de autobuses y las zonas de logística de la futura estación.

El inicio de las obras de construcción de la nueva estación central de La Sagrera reafirma la apuesta del Gobierno de España por la potenciación del ferrocarril como uno de los principales medios de transporte, motor del desarrollo urbanístico y económico de las ciudades, generador de empleo y capaz de favorecer la cohesión social. Esta apuesta se traduce en el desarrollo de nuevas infraestructuras, como la Línea de Alta Velocidad Madrid-Barcelona-frontera francesa, y la modernización e impulso de la red ferroviaria de Cataluña.

Cuenta con una inversión de 589 millones de euros
Blanco y Montilla asisten al acto de inicio de las obras de la nueva estación de La Sagrera (Barcelona)

Se trata del proyecto de soterramiento ferroviario más importante de Europa en la actualidad, con 38 hectáreas de superficie ? Con una afluencia estimada de 100 millones de usuarios anuales, la estación se convertirá en un polo estratégico de la red de transporte público en el área metropolitana de Barcelona ? La Sagrera se construirá con criterios de eficiencia energética y sostenibilidad, y será completamente accesible a personas con discapacidad

Foto de la noticia21/06/2010. – El ministro de Fomento, José Blanco, el presidente de la Generalitat de Cataluña, José Montilla, y el alcalde de Barcelona, Jordi Hereu, han presidido hoy en Barcelona al acto de inicio de las obras de construcción de la Estación de La Sagrera.

Al acto también han asistido el delegado del Gobierno en Cataluña, Joan Rangel, el conseller de Política Territorial y Obras Públicas, Joaquim Nadal, y el presidente de Adif, Antonio González Marín.

Se trata del proyecto ferroviario singular de mayor envergadura adjudicado en España, gracias a una inversión superior a 589,2 millones, y el proyecto de soterramiento ferroviario más grande de Europa en la actualidad, con 38 hectáreas de superficie.

La nueva estación central de La Sagrera se convertirá en un nudo estratégico de la red de transporte público en el área metropolitana de Barcelona al conectar la ciudad de una forma más rápida y segura con la red ferroviaria española y europea.

Las instalaciones se han proyectado con capacidad para acoger un tránsito superior a los 100 millones de viajeros anuales, convirtiéndose en un intercambiador de primer orden, enlazando la alta velocidad ferroviaria con las redes de cercanías, regionales, metro, autobús y taxis, así como con el transporte privado al estar conectada directamente con las principales vías de comunicación.

El conjunto de infraestructuras, la estación central y la urbanización de los sectores de Sant Andreu y La Sagrera representan el proyecto de mayor inversión económica a desarrollar en la ciudad de Barcelona en los próximos años. La inversión global asciende a unos 2.250 millones de euros, sin contar con las posteriores actuaciones de urbanización y edificaciones de viviendas, equipamientos, comercios, oficinas y hoteles.

En esta actuación se cubrirán 38 hectáreas de superficie ferroviaria, lo que permitirá integrar los barrios separados por las vías, a lo largo de casi 4 kilómetros, entre la calle Espronceda y el Nus de la Trinitat, lo que supone una profunda transformación urbanística y de vertebración del territorio en 164 hectáreas, generando nuevas oportunidades de desarrollo económico y de cohesión social.

Principales beneficios
La construcción de La Sagrera ofrece como principales ventajas:

• Una nueva estación que integrará en un mismo edificio, en dos niveles diferentes, los tráficos de cercanías y regionales por vía convencional, y los de alta velocidad y larga distancia en ancho internacional.

• Creación de un espacio intermodal que conectará la alta velocidad con cercanías, regionales, metro y autobuses urbanos e interurbanos.

• Implantación de criterios de accesibilidad integral para personas con discapacidad, criterios de eficiencia energética y sostenibilidad para conseguir un uso racional de la energía y un consumo responsable de los recursos naturales.

• Configuración de un nuevo espacio urbano sobre los terrenos que libera toda la actuación ferroviaria, mediante la construcción de una nueva estación de varios niveles.

• Mejora de las condiciones de acceso al modo de transporte ferroviario en la ciudad de Barcelona.

• Nuevos accesos ferroviarios y viarios en los ámbitos urbanos de La Sagrera, Sant Andreu y Sant Martí.

• Aumento de la seguridad con la adecuación del esquema de vías para tecnologías punta en sistemas de conducción automática de trenes.

• Incremento de la capacidad y la regularidad, como resultado de disponer de doble vía en todo el trayecto.

• Aumento del confort, al establecerse unas condiciones óptimas de rodadura y trazado.

• Reducción de tiempos de viaje y un aumento de la frecuencia de servicios, al disponer de vías específicas para la logística y el estacionamiento de trenes.

Características de la nueva estación
La nueva estación será semisoterrada y tendrá una superficie de casi 259.000 m2, distribuidos en varios niveles y concentrando el máximo de servicios en vertical, contribuyendo a mejorar la eficacia en el movimiento de las personas. Su disposición dará continuidad al espacio público generado sobre las vías actuales y tendrá dos accesos unidos por un gran espacio de conexiones.

Los niveles superiores, a los que se accederá desde La Sagrera, corresponden a los servicios de alta velocidad y a la estación de autobuses interurbanos. El vestíbulo dispondrá de un gran espacio central de acogida y distribución de usuarios, taquillas y zona comercial. Para los servicios de alta velocidad se construirán 10 vías, dos generales y ocho de servicio, con cuatro andenes de 400 m de longitud y un quinto de 200 m, todos ellos con un ancho de 12 m.

Los niveles inferiores se destinarán a los servicios de cercanías, metro y aparcamientos. Las vías de ancho convencional serán objeto de una profunda remodelación para adecuar su paso por la futura estación y se abrirán en un haz de ocho vías al paso por la estación con 4 andenes de 240 m de longitud. Después del ámbito de la estación, se ha proyectado un área logística de servicios de ancho internacional para estacionamiento y mantenimiento.

A ambos lados del vestíbulo de cercanías se integrarán 4 grandes aparcamientos, con una capacidad aproximada de 2.500 vehículos, para servicio tanto de la estación ferroviaria como de la autobuses y en un futuro de la zona de servicios que se construirá en el entorno. Las dos zonas de la estación, lados La Sagrera y Sant Martí, quedarán unidas por un gran patio de conexiones que conforma el nudo intermodal entre los diferentes servicios de transporte público.

La estructura se ha proyectado de forma que se garantiza la accesibilidad universal y el tránsito por todos los espacios del edificio. Asimismo, se han tenido en cuenta parámetros de ahorro de energía y aislamiento térmico, de tal forma que se consigue un uso racional y eficiente de la energía necesaria para la sostenibilidad y la adecuada utilización del edificio.

Por su parte, las obras de construcción de los accesos, tanto ferroviarios como viarios así como de parte de la estructura de la estación de autobuses, comprenden el ámbito situado entre el Pont de Bac de Roda hasta la futura estación, con una longitud de 220 m, y desde este punto hasta el denominado triángulo ferroviario.

La accesibilidad de vehículos se resolverá mediante la red viaria en superficie prevista para el sector, completada con un sistema de viarios segregados que permiten el acceso a los aparcamientos, la estación de autobuses y las zonas de logística de la futura estación.

El inicio de las obras de construcción de la nueva estación central de La Sagrera reafirma la apuesta del Gobierno de España por la potenciación del ferrocarril como uno de los principales medios de transporte, motor del desarrollo urbanístico y económico de las ciudades, generador de empleo y capaz de favorecer la cohesión social. Esta apuesta se traduce en el desarrollo de nuevas infraestructuras, como la Línea de Alta Velocidad Madrid-Barcelona-frontera francesa, y la modernización e impulso de la red ferroviaria de Cataluña.